Wednesday, September 26, 2007

Ourense (y II): Otros desmadres

De Punxín viajamos a Ourense, donde se viven otros desmadres que el diccionario de Seco define como "sobrepasar los límites de lo normal o razonable". Y esto es lo que ocurre o al menos trasciende de la gestión de los políticos en las instituciones local y provincial. En el ayuntamiento, cuatro meses después de las elecciones la Corporación bipartita aún debe estar contando los funcionarios fijos, el personal laboral, los contratados eventuales y los agentes de Desarrollo Local trasvasados por la Diputación, que no caben en la casa consistorial.

Los fijos aumentaron antes de las elecciones con una oposición "de urgencia" convocada por el gobierno anterior que, curiosamente, aprobaron familiares y allegados de dirigentes populares. Seguramente es verdad aquella sentencia de Fraga: "Los hijos de gente preparada están más capacitados". Lo cierto es que el bipartito heredó un concello con las arcas vacías, casi en bancarrota, y lleno de personal para el que no hay cometido ni espacio. Es tan esperpéntico como el que estén en nómina 32 bedeles para hacer recados, 8 técnicos de turismo de los que sólo uno es titulado y 8 porteros para guardar dos puertas. Aquellos políticos merecían algo más que la derrota en las urnas, pero se fueron de rositas.

Las cosas que se cuentan de la Diputación son igual de alucinantes. Además de las contrataciones de familiares y amigos, la oposición habla de funcionarios que no acuden al trabajo y cobran; de marginaciones caprichosas de técnicos solventes; de pelotazo urbanístico por la venta de una finca por un cuarto de su valor o, la última, de la creación de una sociedad urbanística para, según la oposición, "seguir colocando a los afines".

Las crónicas que llegan de la ciudad de As Burgas relatan muchos otros casos que demuestran que ni en la dictadura se gobernaba con tanta desfachatez. Yo no sé qué mal fario persigue a los ourensanos para que una provincia que generó empresarios y profesionales acreditados y cabezas tan claras como Otero, Risco, Xaquín Lourenzo o Casares esté gobernada por políticos tan mediocres e irresponsables.

Friday, September 21, 2007

Vivienda y precios

Cuando se tata de evaluar las medidas gubernamentales, y más cuando se acerca el periodo electoral, la prudencia aconseja siempre esperar y examinar con detenimiento, como merece, todo aquello que se anuncia como grandes logros. El paquete de medidas de la nueva ministra para ayudar a los jóvenes en el acceso a una vivienda, en este caso en alquiler, ha de beneficiarse, pues, de esa virtud no frecuente en demasía. Al menos, mayor prudencia que la que han demostrado los propios protagonistas al anunciar sólo una parte de las medidas con ánimo claramente electoralista, y que, examinadas aisladamente, no dejan de ser medidas pretenciosas e insuficientes. Pretenciosas, por presentarlas como una solución para el problema en esa franja de edad; insuficientes, porque no dejan de ser estímulos para la demanda que, “ceteribus paribus”, conllevan inmediatamente un alza de precios en los alquileres, digan lo que digan.

No existe mejor ejemplo que recurrir a las experiencias pasadas. En este caso, les cuento brevemente lo que pasó con el plan de alquiler de la Xunta, que viví en primera persona. Hace tres años alquilé en mercado libre un apartamento para una hija que se iba a estudiar a Vigo. Se lo alquilé a una sociedad dedicada a esta actividad de arrendamiento de viviendas, que ella misma promovía. El precio, alto, pero acorde con la situación del mercado, que comprobé también deambulando por las calles y los pisos que se ofertaban en aquel momento. Al año siguiente, ya en vigor el plan de la Xunta de ayudas al arrendatario, dejamos el apartamento para alquilar otro mejor comunicado con el campus olívico. En aquel momento supe el efecto de aquellas medidas de boca del mismo que me había alquilado el apartamento, contento por liberarlo: se ayudaba al inquilino, que pagaba menos de lo que yo pagaba, pero también al arrendatario, que había subido el precio en torno al 20%. En consecuencia, quien no se beneficiara de aquel plan debía soportar la inflación descarada de los precios. ¿Qué había pasado?

Incentivar la demanda sin ninguna actuación simultánea sobre la oferta inmobiliaria lleva aparejado inmediatas alzas en los precios, con lo que los loables objetivos pretendidos en un principio se convierten al final en un derroche de recursos públicos. Esta es una denuncia que algunos han empezado a hacer en las tribunas públicas. Por supuesto, el Gobierno se limita a emplazarnos para el lanzamiento del segundo capítulo de su programa. Incluso el diario El País, afín ideológicamente al partido del Gobierno, cuestionó las medidas, y ahora nos sorprendemos de la reacción de la ministra, pidiendo “coherencia” entre la información y la opinión del periódico.

Wednesday, September 19, 2007

Ourense (I): la limpiadora de Punxín

Punxín es un ayuntamiento pequeño de la comarca de O Carballiño en la provincia de Ourense, que dista de la capital unos 17 kilómetros. Según el censo de 2005, cuenta con 942 habitantes, poca población porque también padeció los rigores de la emigración que causó una incesante pérdida de efectivos.

Tradicionalmente gobernado por la derecha, en las últimas municipales las urnas dieron la victoria al Partido Socialista y el primero de su lista accedió a la alcaldía. Un cambio de gobierno esperado y normal, que revitaliza el sistema y fortalece las instituciones.

Pero hete aquí que la primera decisión que tomó el nuevo regidor en el primer día hábil de mandato fue firmar la carta de despido de Ramona Lema, la limpiadora contratada por el Concello que repartía sus quince horas semanales de trabajo entre el propio concello, el colegio público y el centro de salud. Percibía un salario de 296,36 euros.

El Juzgado de lo Social de Ourense que vio la demanda de la trabajadora falló que el despido es nulo y en los fundamentos de la sentencia señala que se ha acreditado la discriminación y vulneración del principio de igualdad porque la única causa de despido es la militancia de la limpiadora en un partido político distinto del que gobierna en Punxín. Por ello, condena al Concello a readmitirla en el mismo puesto y en iguales condiciones.

Tres reflexiones. Primera, envidiar la suerte del Concello de Punxín cuyo problema más importante es el causado por una limpiadora cumplidora y mal pagada, que genera la primera decisión tan contundente de su alcalde.

Segunda: constatar la pervivencia de procederes de la época feudal. Actuación tan genuinamente prepotente y caciquil como esta debería avergonzar a ese regidor del partido de don Pablo Iglesias, que también fue un obrero maltratado.

Tercera: las palabras de Ramona Lema: "Se unha persoa cumpre co seu traballo hai que respectala, non se pode ir asoballando como fixo este home. A sentenza deixa as cousas no seu sitio. É de lei". Una sencilla lección de cómo hay que comportarse con los trabajadores.

Thursday, September 13, 2007

Educar para la Ciudadanía

Una de las cuestiones que desde hace meses viene suscitando un encendido debate político, religioso y mediático es la asignatura Educación para la Ciudadanía.

La nueva disciplina está generando copiosas opiniones, con posturas tan irritadas y contrapuestas que uno tiene la impresión de encontrarse de nuevo ante las dos Españas irreconciliables por esa división ancestral inyectada en vena por nuestros antepasados los iberos. Entrar en la polémica en el espacio de medio folio es una temeridad que asumo para apuntar unas consideraciones.

Cuando asoma la violencia en la familia, en las aulas o en las noches de botellón; cuando es manifiesta la falta de civismo en la vía pública; cuando aparecen brotes de racismo, xenofobia o maltrato; en definitiva, cuando se atenta contra los modales o se contravienen las normas establecidas, todos, absolutamente todos, además de pedir respuestas policiales y judiciales si el caso las requiere, reclamamos el papel de la educación en la transmisión del conjunto de valores que contribuyan a erradicar aquellos comportamientos rechazables.

Pues parece que Educación para la Ciudadanía va en esa línea de inculcar en los escolares una serie de conocimientos necesarios para mejorar sus actitudes y conductas en la vida cotidiana. Los valores éticos, los derechos humanos, los deberes y obligaciones, la justicia y el uso de la libertad, el cuidado del medio, la tolerancia y el respeto a las diferencias, la resolución pacífica de conflictos, la sexualidad y los distintos modelos de familia, son algunos de los contenidos cuyo objetivo es formar personas que ejerzan como ciudadanos de forma responsable y consciente.

Me resisto a creer que sea perverso formar a los jóvenes de hoy en estos valores cívicos, que complementan la educación de los padres. Ahora bien, la clave del éxito de esta asignatura, que es una gran oportunidad para la sociedad, está en encomendar su enseñanza a un profesorado competente y sensato, alejado de cualquier partidismo. Por contra la amenaza radica en que, después de tanta polémica, puede acabar siendo una nueva maría.

Tuesday, September 11, 2007

Legal, pero indecente

Tengo curiosidad por conocer la resolución del Valedor do Pobo sobre el complemento de altos cargos, asunto que él mismo calificó de "muy conflictivo", y sobre el que deberá pronunciarse a instancias de la CIG.

Porque en plena canícula nuestros parlamentarios aprobaron una nueva reforma de la Ley de la Función Pública, cuya novedad más llamativa es la disposición adicional decimoséptima en virtud de la cual todos los funcionarios de carrera con dos años continuados o tres interrumpidos en cargos como director general o superior o en puestos en la Administración pública (alcaldes, presidentes de diputación, diputados) percibirán un complemento de destino de hasta 14.721 euros.

Habitualmente en el Hórreo andan a la greña, pero en esto se produjo el milagro de la unanimidad. Llama especialmente la atención que los dos grupos del Gobierno olvidaron de pronto "el caos administrativo heredado de la situación anterior", así como la declaración programática del Gobierno del cambio que iba a primar la competencia, la capacidad, la transparencia y el mérito.

De nada han servido la indignación de los funcionarios; la denuncia de un sindicato; la protesta del Movemento pola Igualdade do Emprego Público; el rechazo explícito de una alto cargo de la Xunta, honrosa excepción; la perplejidad de la gente, o las decenas de comentarios periodísticos. Será que los calores del estío insensibilizan a los diputados-funcionarios, que se premian a si mismos con un suculento sueldo vitalicio.

Ese Plus funcionarial es más llamativo si se compara con el sueldo mínimo interprofesional de 570,6 euros al mes; con el sueldo medio de los gallegos, que supera en poco los mil euros; con la pensión media que en Galicia es de 563 euros, la más baja de todas las comunidades autónomas, o con que un 64% de las familias tiene dificultades para llegar a fin de mes.

En fin, un premio por los servicios prestados en cargos públicos, ejercidos tantas veces con manifiesta incompetencia. No sé que dirá el Valedor pero para el ciudadano que paga, que no cuestiona su legalidad, es una indecencia y hasta un insulto.

Wednesday, September 05, 2007

Los buenos propósitos

Cuando empieza a desaparecer el bronceado estival son muchos los individuos que padecen ese mal de las sociedades satisfechas que los psicólogos llaman síndrome postvacacional, una especie de alteración anímica que tiene su causa en la ruptura del ritmo vacacional y la brusca incorporación al trabajo. Dejar el chiringuito de la playa o del campo, los amores primerizos o tardíos, los días de relax, descanso prolongado o intensa actividad social trae consigo estos desequilibrios físico-psíquicos que, dicen los expertos, son más acusados en quienes están más insatisfechos de su vida laboral.

Tras tanta felicidad enlatada, decaen los ánimos ante la perspectiva de volver a la rutina y responsabilidad de la vida diaria, que depara el reencuentro con el trabajo desagradable, el jefe impertinente, la hipoteca gravosa y la dificultad para llegar a fin de mes.

Pero en otras personas, parece que aquellas que tienen una vida laboral gratificante, el final del verano provoca un estado anímico positivo capaz de contrarrestar ese "bobo decaimiento" que produce la cercanía del otoño.

Una de sus manifestaciones es la euforia de los buenos propósitos. Después del veraneo quien más quien menos ha sucumbido a la tentación de emprender una serie de actividades y proyectos con las que cree va a conquistar el mundo: un nuevo intento de estudiar inglés, adelgazar esos quilos de más, enfrascarse en nuevas lecturas para subsanar lagunas culturales, trazar un plan de ahorro? Algo de esto deben de saber los empresarios y los expertos en publicidad porque es en estos días cuando aparecen en el mercado numerosas ofertas de productos tan diversos como cursos de idiomas, grandes enciclopedias y obras maestras, recopilaciones musicales, fascículos y coleccionables varios o descuentos especiales en los gimnasios.En septiembre, parece que todo comienza de nuevo y mejor empezar con fuerza y optimismo que, si no garantizan la felicidad, ayudan para ir tirando. Porque acabado el mes de vacaciones, es muy importante gestionar bien la rutina de los once restantes, que es donde vamos a pasar el resto del año.

Tuesday, September 04, 2007

Las cuestionadas diputaciones

Creadas en el siglo XIX como instrumentos de una nueva división territorial que superaba el caos organizativo del antiguo régimen, desde 1835 vienen ejerciendo sus funciones como instituciones muy activas en la prestación de servicios. Pese a su dependencia de la fiscalidad estatal, escaso presupuesto e incapacidad de generar recursos propios, en su haber hay que anotar el desarrollo de una importante red viaria, la implantación de servicios sanitarios y asistenciales, la difusión cultural o el fomento industrial. En tiempos de la dictadura, cuando todos éramos pobres y la mayor parte de los concellos estaban a dos velas, con cierta frecuencia aparecía la mano generosa de la Diputación para levantar un puente, abrir una carretera o arreglar una escuela. No sabría decir si el modelo fue superado por la realidad política, social y económica de Galicia y las diputaciones están agotadas. Debe ser así porque hoy son muy cuestionadas y hasta calificadas de "predemocráticas, nidos de caciquismo, feudo de prácticas clientelares" y otras lindezas. Aunque en la mesa de negociación los socios de Gobierno fueron más comedidos y hablaron de reformarlas para las nuevas exigencias de una administración "de base funcional y urbana", como premisa de partida para su abolición. Ahora, van a gobernar las dos que les han otorgado las urnas tras alcanzar un escrupuloso equilibrio en el reparto de poder. Tienen, pues, el mando en dos provincias y disponen del Diario Oficial en Galicia, que es la situación soñada para emprender reformas desde dentro para adaptarlas a los nuevos tiempos o inventar otras instituciones más cercanas a los ciudadanos, que presten mejores servicios a los concellos y sean más transparentes en su gestión. Estaremos atentos, bien entendido que esperamos algo más que un cambio semántico o una duplicidad de chiringuitos. Pero cabe la posibilidad de que en el horizonte de 2011 se hable de las diputaciones en los mismos términos. Será así si los socios de hoy solo disfrutan del poder haciendo bueno el aforismo de Lampedusa "que todo cambie para que todo siga igual".