En 2007 miles de gallegos seguían emigrando de su tierra -17.500, según el INE- en busca de un trabajo que aquí no encontraban. Madrid, Cataluña y Canarias fueron los puntos de destino para la gran mayoría, donde encontraron empleo en la construcción, los servicios y otras actividades.
Eran otros tiempos. Porque en este annus horribilis que está a punto de concluir se invierte la tendencia y más de 10.000 compatriotas de esta última oleada emigratoria y de otras anteriores han regresado ya a Galicia a una media de 900 por mes, según el Ministerio de Trabajo. La mayoría vuelve de Canarias donde perdieron sus empleos en los sectores de la construcción, la hostelería y los servicios porque “a cousa está fatal, están volvendo familias enteiras, nos últimos días que estiven alí non paraban de despedir xente”, decía un pontevedrés que regresó tras siete años en Lanzarote.
Son las víctimas de la crisis de la construcción y del turismo, las principales “industrias” de las Islas, que regresan con la incertidumbre por compañera de viaje y la inseguridad ante el fututo porque “aquí non hai emprego, así que os que volven, terán que seguir emigrando”, decía el alcalde de un núcleo de población con muchos retornados. Tiene razón ese alcalde. Las cosas aquí están igual o peor, no solo en la construcción que es un sector perdido para muchos años, sino también en sectores hasta hace poco pujantes como la automoción, la pesca, el textil o los servicios, que han generado en los últimos meses tantos expedientes de regulación de empleo que nos hacen retroceder a cifras de hace una década.
Casi todos vamos a pasar las Navidades en medio de la más grave incertidumbre de nuestras vidas y estos días no van a ser especialmente felices para quienes en la emigración o en su propia tierra recibieron el regalo envenenado del paro, que es la cara más cruel de la crisis. Pero, aunque el gobernador del Banco de España dice que “la desconfianza es total”, en días como hoy siempre debe quedar un lugar para la esperanza en que el año próximo -año electoral- empiece a recuperarse la actividad y el empleo para haya sitio y trabajo para todos en esta tierra. Mientras tanto, bienvenidos a casa.