Disfrutan del primer día de vacaciones y desayunan juntos los padres y su hija. “¡Como ha crecido la niña desde la última vez que la vimos!”, reflexiona el padre. ¡Es que no sé si es ella!, contesta la madre. La niña, que observa atentamente a sus progenitores, piensa para sí: “¿Serán mis padres estos tíos?”. La escena familiar está tomada de una viñeta de El Roto y puede parecer un tanto exagerada, pero refleja la realidad de las relaciones entre padres e hijos en gran número de familias: no se reconocen.
El sociólogo Javier Enzo dice que hay dos tipos de familia que tienen escasa capacidad educadora que él llama la familia nominal y la familia conflictiva. La primera, “la más numerosa de las familias españolas”, tiene de tal solo el nombre. En su seno hay una situación de coexistencia pacífica dentro de una política de laissez faire, laissez passer, es decir, mirar para otro lado cuando aparecen problemas o algo no gusta.
En la familia conflictiva, “los hijos y los padres están a la greña continua”, estos son incapaces de entender siquiera los cambios biológicos de sus vástagos y ante alguna deriva de ellos, como alcohol o droga, reaccionan hasta violentamente agrandando la distancia entre la problemática de los hijos y la escasa comprensión de los padres.
Estos dos tipos representan al 60% de las familias españolas y destacan más por la dejación de funciones que por el conocimiento mutuo y la educación, porque también escasea lo que se entiende por convivencia. Un estudio de Inés Alberdi y Pilar Escario sobre la paternidad concluye que muchos progenitores quieren ser padres responsables, pero tan solo pasan 22 minutos al día con sus hijos.
Por eso ellos se quejan de que los padres los aparquen en el colegio, en la tele o en el parque y, según conclusión de la tesis “Aproximación a los valores y estilos de vida de los jóvenes de 13 y 14 de la provincia de A Coruña” defendida en la Facultad de Psicología de la USC, reclaman a sus progenitores que, además de comprarles cosas, les dediquen más tiempo. En el curso y en vacaciones.