Los sindicatos del Concello pontevedrés estaban un poco alterados la semana pasada por culpa de una circular del concejal de personal que recordaba a los funcionarios "os deberes e principios na actuación de servizos ó Concello". Unas posteriores declaraciones del edil en las que decía que se había detectado cierto descontrol en el cumplimiento del horario por parte de algunos trabajadores soliviantaron más a sus representantes sindicales que se sienten ofendidos, exigen una rectificación y amenazan con una querella en defensa del honor de sus representados.
Hay mucha generalización injusta sobre los funcionarios a los que se les aplica casi sin excepción la práctica del "vuelva usted mañana" de Larra, que retrataba a varios empleados públicos cuya característica común era la pereza. Afortunadamente, hoy la gran mayoría de los trabajadores de las administraciones son cumplidores en la gestión y prestación de servicios al ciudadano; son buenos profesionales, tanto mejores cuanto mejor están dirigidos.
Pero, en cualquier contexto laboral hay excepciones, como en tiempos de Larra. Sostienen los expertos que en toda empresa pública o privada hay un porcentaje de empleados que no solo no dan palo al agua, como se dice en román paladino, sino que se escaquean cuanto pueden en otras obligaciones, incluido el cumplimiento del horario, y no creo que el personal de este Concello escape a regla universalmente aceptada en los tratados de management.
Por eso, visto desde la distancia, no debería resultar ofensiva para nadie, salvo para los incumplidores, una circular que intente corregir los desmadres de una minoría. Y que el concejal la justifique por haber detectado cierto ambiente de relajación horaria entre algunos funcionarios -solo algunos, sin generalizar-, es una afirmación constatable en los ámbitos de trabajo, incluido este. Quizá harían falta circulares similares en otras administraciones.
Mancha más el honor de los buenos profesionales el cupo de los compañeros holgazanes que la circular, que a lo mejor no es políticamente correcta, pero es socialmente acertada.
Hay mucha generalización injusta sobre los funcionarios a los que se les aplica casi sin excepción la práctica del "vuelva usted mañana" de Larra, que retrataba a varios empleados públicos cuya característica común era la pereza. Afortunadamente, hoy la gran mayoría de los trabajadores de las administraciones son cumplidores en la gestión y prestación de servicios al ciudadano; son buenos profesionales, tanto mejores cuanto mejor están dirigidos.
Pero, en cualquier contexto laboral hay excepciones, como en tiempos de Larra. Sostienen los expertos que en toda empresa pública o privada hay un porcentaje de empleados que no solo no dan palo al agua, como se dice en román paladino, sino que se escaquean cuanto pueden en otras obligaciones, incluido el cumplimiento del horario, y no creo que el personal de este Concello escape a regla universalmente aceptada en los tratados de management.
Por eso, visto desde la distancia, no debería resultar ofensiva para nadie, salvo para los incumplidores, una circular que intente corregir los desmadres de una minoría. Y que el concejal la justifique por haber detectado cierto ambiente de relajación horaria entre algunos funcionarios -solo algunos, sin generalizar-, es una afirmación constatable en los ámbitos de trabajo, incluido este. Quizá harían falta circulares similares en otras administraciones.
Mancha más el honor de los buenos profesionales el cupo de los compañeros holgazanes que la circular, que a lo mejor no es políticamente correcta, pero es socialmente acertada.
No comments:
Post a Comment